El gigante de las redes sociales X, antes conocido como Twitter, se enfrentará a Venmo y PayPal en 2024 con su propio servicio de pago entre particulares. Este movimiento se alinea con el viejo sueño de Elon Musk de transformar X en una «aplicación para todo» que abarque no solo las redes sociales, sino también las transacciones financieras.
La historia de Musk con los pagos en línea se remonta a la década de 1990, cuando cofundó X.com, que más tarde se convirtió en PayPal. Aunque no participó directamente en el desarrollo posterior de la empresa, siempre ha expresado su interés por volver a entrar en este espacio. Su adquisición de X en 2022 por 44.000 millones de dólares presentó la oportunidad perfecta.
Antes de la adquisición por Musk, Twitter ya había registrado Twitter Payments LLC, insinuando futuros esfuerzos financieros. El propio Musk alimentó la especulación poco después de la adquisición, declarando que X evolucionaría para incluir «comunicaciones integrales y la capacidad de dirigir todo tu mundo financiero.»
WeChat, la aplicación china que combina mensajería y pagos, sirve de inspiración clave para la visión de Musk. Al parecer, dijo a los empleados de X en 2023: «Si podemos recrear eso con X, tendremos un gran éxito».
X afirma tener un «impulso imparable» bajo el liderazgo de Musk, citando el récord de participación de los usuarios en nuevas funciones como Immersive Video, que cuenta con 100 millones de espectadores diarios. Musk y la consejera delegada Linda Yaccarino han declarado públicamente haber alcanzado los 500 millones de usuarios, con más de 2 millones de registros diarios. Sin embargo, datos independientes pintan un panorama diferente. Según Similarweb, X sólo tuvo 94 millones de visitas totales al sitio en diciembre de 2023, con 45,9 millones de usuarios únicos. En comparación, Threads, el rival de Meta en blogs cortos, tuvo 76,6 millones de usuarios en el mismo periodo.
Queda por ver el éxito del servicio de pago entre particulares de X y su visión más amplia de «aplicación para todo». En cualquier caso, este movimiento supone una audaz ambición de remodelar el panorama de las redes sociales y redefinir la forma en que los usuarios interactúan con la plataforma.