Amazon está ampliando su enfoque en la integración de inteligencia artificial y robótica mediante el aumento de las inversiones de su fondo de innovación industrial, que cuenta con una dotación de 1.000 millones de dólares. Esto se produce en un momento en el que la empresa busca optimizar la eficiencia de su red logística.
Según Franziska Bossart, responsable de la división de capital de riesgo corporativo establecida en 2022, declaró al Financial Times que «la inteligencia artificial generativa muestra un gran potencial para la robótica y la automatización», y es un área en la que el fondo se centrará este año.
Bossart también indicó que se espera que el ritmo de inversión del fondo aumente significativamente en 2024. El año pasado, el fondo realizó su primera inversión en una empresa de inteligencia artificial generativa, aunque los detalles específicos no se han revelado.
Hasta la fecha, el fondo de innovación industrial de Amazon ha realizado un total de 12 inversiones, incluida una en Mantis Robotics, que está desarrollando un brazo robótico equipado con sensores para colaborar con los trabajadores humanos.
En un contexto en el que las grandes empresas tecnológicas están destinando enormes sumas de dinero al desarrollo de tecnologías de inteligencia artificial generativa, el fondo de Amazon está buscando nuevas oportunidades de inversión en este campo. La IA generativa tiene la capacidad de producir textos, imágenes y códigos que se asemejan a los creados por humanos en cuestión de segundos.
Microsoft, por ejemplo, ha realizado inversiones significativas en este ámbito, con hasta 13.000 millones de dólares invertidos en OpenAI. Esta colaboración ha permitido a Microsoft integrar la tecnología de ChatGPT, desarrollada por OpenAI, en su suite de aplicaciones de productividad Office y en su motor de búsqueda Bing. Además, recientemente, Microsoft anunció una inversión en la empresa francesa de IA, Mistral.
Por otro lado, Amazon también está demostrando su interés en este campo, con inversiones que superan los 4.000 millones de dólares en Anthropic, una startup especializada en IA generativa. Además de su enfoque en inteligencia artificial, Amazon ha estado a la vanguardia en el campo de la robótica, con inversiones previas que han superado los 400 millones de euros en tecnologías como la robótica industrial y sistemas de clasificación utilizados en sus almacenes en Europa. La compañía ha desplegado más de 750.000 robots móviles en su red de operaciones, demostrando su compromiso con la automatización y la innovación tecnológica.
Bossart mencionó que el fondo de innovación industrial de Amazon está buscando invertir en nuevas empresas que puedan respaldar los objetivos del gigante del comercio electrónico de mejorar la eficiencia, la seguridad para sus asociados y la rapidez en las entregas a los clientes.
Además, destacó que el enfoque del fondo se ampliará este año, incluyendo la posibilidad de invertir en empresas que se centran en la etapa final de las entregas, conocida como la «última milla», así como expandiendo su alcance geográfico y considerando inversiones en empresas en etapas más avanzadas de desarrollo. Sin embargo, Bossart no proporcionó detalles sobre el monto exacto que el fondo ha invertido hasta la fecha, y optó por no comentar sobre un informe que sugería que se habían invertido 110 millones de dólares hasta junio.
En cuanto a la automatización de almacenes y logística, Bossart destacó que el objetivo no es eliminar completamente la necesidad de empleados, sino más bien adaptar los roles laborales a medida que los robots y vehículos automatizados asumen tareas repetitivas o peligrosas. «También estamos lejos de reemplazar completamente a los trabajadores humanos», añadió.
Aunque la decisión de Amazon de adoptar la inteligencia artificial para impulsar la automatización podría generar inquietud entre sus miles de empleados de almacén y reparto en todo el mundo, el anuncio de que su división de inversión aumentará su financiamiento este año podría servir como un estímulo para las startups tecnológicas emergentes.
Durante la reciente recesión tecnológica, los inversores de capital de riesgo han sido cautelosos a la hora de realizar nuevas inversiones en empresas en fase inicial. En su lugar, han optado por consolidar las empresas existentes en sus carteras o buscar grupos que puedan demostrar rentabilidad.
La estrategia de Amazon de buscar una mayor automatización y eficiencia en sus operaciones de almacén y cadena de suministro también se alinea con su objetivo más amplio de mejorar los márgenes de beneficio después de un período de fuertes inversiones en logística durante la pandemia.