Google, la empresa líder en el mundo de las tecnologías de la información, ha anunciado una serie de despidos que afectan a cientos de empleados en diferentes áreas de su negocio. Esta medida se enmarca en un proceso de racionalización de sus operaciones, que busca reducir los costes y optimizar los recursos. Al mismo tiempo, la empresa está redefiniendo sus prioridades estratégicas, con un enfoque especial en la inteligencia artificial generativa (IA).
¿Qué implica la reestructuración?
La reestructuración de Google se ha hecho pública el 10 de enero de 2024, y se espera que se complete en los próximos meses. Según reuters, los despidos afectan a varios departamentos, entre los que se encuentran:
- Asistente: El equipo de Voice Assistant, la tecnología que sustenta el popular Google Assistant, ha sufrido una reducción significativa de personal. Esto se debe a que la empresa está apostando por la IA generativa como el futuro de su asistente virtual, que le permitirá generar respuestas más naturales, personalizadas y creativas a las consultas de los usuarios. Google ha anunciado recientemente sus planes de integrar la IA generativa en su Asistente, utilizando su propia plataforma de aprendizaje profundo, TensorFlow, y su modelo de lenguaje natural, LaMDA.
- Hardware: Los equipos responsables de los dispositivos de hardware de Google, como los teléfonos Pixel, los dispositivos domésticos inteligentes Nest y los wearables Fitbit, también han visto reducida su plantilla. El equipo de realidad aumentada (RA) ha sido el más afectado, lo que sugiere que Google está perdiendo interés en esta tecnología. Curiosamente, esta decisión se produce después de que Google adquiriera Fitbit en 2021, una empresa líder en el mercado de los wearables. Esto plantea la cuestión de si Google tiene una visión clara de su estrategia de hardware, o si está experimentando con diferentes opciones sin un rumbo definido.
- Ingeniería: Los equipos centrales de ingeniería de Google, que se encargan de desarrollar y mantener la infraestructura tecnológica de la empresa, también se han visto afectados por los despidos, aunque no se ha revelado el número exacto. Esto indica que Google está reevaluando sus prioridades dentro de su núcleo tecnológico, y posiblemente reasignando recursos a otras áreas que considera más relevantes o rentables.
La reestructuración de Google no es un hecho aislado, sino que forma parte de un contexto más amplio de cambios en el sector tecnológico. En los últimos años, la industria ha experimentado una desaceleración económica, que se ha visto agravada por la pandemia de COVID-19 y sus consecuencias. Esto ha obligado a muchas empresas a recortar gastos y a buscar formas de aumentar su eficiencia y competitividad. Google no es una excepción, y ya en enero de 2023 realizó una reducción de plantilla del 6%, que afectó a unos 10.000 empleados.
Sin embargo, la reestructuración de Google también responde a un cambio estratégico dentro de la propia empresa, que está redefiniendo sus áreas de enfoque y sus objetivos a largo plazo. Google, al igual que otros gigantes tecnológicos, está invirtiendo fuertemente en el desarrollo de la IA generativa.
La apuesta de Google por la IA generativa podría explicar la reorientación de sus recursos hacia esta área, y la reducción de personal en otras que considera menos prioritarias o con menos potencial. Esto podría implicar un cambio en la visión y la misión de Google, que históricamente se ha centrado en organizar la información del mundo y hacerla accesible y útil. Ahora, Google podría estar más interesado en crear nueva información, y en ofrecerla de forma más atractiva y personalizada.