Un gel inyectado en el escroto podría ser el próximo anticonceptivo masculino

Un gel inyectado en el escroto podría ser el próximo anticonceptivo masculino

Para los hombres que no están listos para la opción permanente de la vasectomía, se vislumbra en el horizonte una nueva posibilidad: una solución de hidrogel reversible que se inyecta en los conductos deferentes para bloquear los espermatozoides. La empresa de biotecnología Contraline, con sede en Virginia, está probando este innovador método, que ofrece la esperanza de una opción anticonceptiva masculina duradera, pero no permanente.

En los primeros ensayos realizados en Australia, 23 hombres se sometieron sin problemas a este procedimiento, consistente en inyectar un hidrogel a base de agua en los conductos deferentes, que transportan los espermatozoides. En un mes, el recuento de espermatozoides se redujo en más del 99%, sin efectos secundarios graves. Kevin Eisenfrats, director general de Contraline, lo compara con un DIU para hombres, que llena un vacío crítico en las opciones de control de la natalidad.

A diferencia de la vasectomía, que secciona los conductos deferentes, el método de Contraline utiliza una pequeña punción y un inyector manual para administrar el gel a través de un catéter. El procedimiento dura unos 20 minutos con anestesia local y la punción se cura sola. El gel actúa como un filtro de café, bloqueando los espermatozoides y permitiendo el paso del semen.

El ensayo actual se centra en la seguridad y la longevidad, no en la prevención del embarazo. Las participantes utilizaron métodos anticonceptivos de reserva durante dos años. El hidrogel está diseñado para disolverse con el tiempo, con el objetivo de una vida útil de uno a dos años. Y lo que es más importante, la reversión también está sobre la mesa. Contraline ha conseguido revertir los efectos del gel en perros y tiene previsto realizar un ensayo en humanos este año para probar la reversibilidad a demanda.

Sin embargo, urólogos advierten de que cualquier procedimiento médico conlleva riesgos, y éste podría implicar infecciones cutáneas, molestias o pequeños hematomas. También hay que investigar los efectos a largo plazo, como la formación de cicatrices y la seguridad de las inyecciones repetidas. Además, los métodos de control para garantizar la eficacia continuada del gel son una consideración práctica.

Contraline se enfrenta a un largo camino antes de su comercialización. Se necesitan ensayos más amplios con cientos de hombres y sus parejas para confirmar la eficacia de la prevención del embarazo. No obstante, Eisenfrats se muestra optimista respecto a la posibilidad de lanzar un ensayo en EE.UU. en los próximos años.